Llego el día de conseguir uno de los sueños de años: Machu Picchu.
Empezamos el día pronto pues habíamos leído que se formaban largas colas para subir en el bus. Por lo tanto, nos levantamos a las 5 a.m., desayunamos en el hotel y a las 6:15 aprox. estabamos en la cola del autobus. Asustan un poco la cantidad de gente que hay pero va rápido, así que sobre las 7 ya estábamos arriba, en la entrada del centro histórico. Nosotros compramos las entradas anticipadamente en Madrid así que sólo tuvimos que ponernos a la cola para entrar (128 Soles/persona).